CICrA Justicia Ambiental nace de la motivación de tres jóvenes investigadoras: Bea, licenciada en Ciencias Ambientales y dos juristas, Isa y Ale, especializadas en Derecho Ambiental (Máster de Derecho Ambiental de la Universidad Rovira i Virgili). Dos de las socias somos doctoras en Derecho desde 2016, ambas con tesis que adoptan la justicia ambiental y climática como perspectiva de análisis.
Tras muchos meses de trabajo, hemos constituido la cooperativa CICrA Justicia Ambiental con el fin de dotarnos de una estructura que nos ayude a poner en común y potenciar nuestras habilidades como investigadoras, docentes y activistas, y a mejorar nuestras condiciones laborales en el marco de la economía social, solidaria y ambiental. Hasta hace poco, las socias de la cooperativa veníamos trabajando individualmente, como consultoras o enlazando diferentes contratos laborales temporales, a menudo precarios y sin unas bases colectivas.
A lo largo de los últimos años, habíamos trabajado conjuntamente en algunos proyectos y a medida que estas colaboraciones se hacían más frecuentes, conscientes de nuestra complementariedad y de que juntas podíamos obtener resultados mucho mejores, sentimos la necesidad de ir más allá: de crearnos un espacio de seguridad, para no solo colectivizar potenciales sino también riesgos, para crearnos nuestras propias normas y principios, tanto laborales como de gestión y para decidir colectivamente nuestros rumbos. En ese sentido, pues, CICrA Justicia Ambiental nace como un proyecto de resiliencia en el contexto de una crisis sistémica que precariza vidas.
Nuestro proyecto nace muy enraizado al tejido asociativo catalán, particularmente de Barcelona y Tarragona, aunque también de otras regiones del Estado español y de Latinoamérica. Las socias hemos sido investigadoras, voluntarias y trabajadoras en diferentes centros de investigación, organizaciones sociales y políticas. Consideramos que constituirnos como cooperativa ayudará a potenciar nuestro trabajo en red con estas y otras entidades del sector. Además, uno de nuestros objetivos es, precisamente, colaborar con ellas en temas jurídico-ambientales sobre los que carecen de conocimientos específicos y en los que nosotras podemos aportar.
Este proyecto nos ilusiona no sólo porque representa una apuesta arriesgada para asegurarnos unas condiciones laborales más dignas, sino también porque nos permite perseverar reforzadas en la lucha por la justicia socioambiental y nos adentra en el sector de la economía social, solidaria y ambiental, haciendo de nuestro pequeño espacio una casa compartida con un gran número de entidades.
Aprovechamos esta publicación para agradecer a nuestras familias y amistades, así como a los colectivos con los que colaboramos por el apoyo que nos han dado en esta emocionante aventura. Gracias también a Hey Bloom! Agency por su paciencia y ayuda con el diseño de una imagen que nos representara.
¡Te invitamos a curiosear por nuestra página web y a contactar con nosotras!